16 junio 2009

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La pasión que nos induce a profundizar

acaba sometiéndose irremediablemente a la decepción










6 comentarios:

El Doctor dijo...

Mi querida Sandra,tú si que sabes lo que es un post;pequeño,profundo,es decir,que surque las aguas de la red.Esto es lo que yo quise hacer en un principio,y ya ves,letras y más letras.Nunca me quedo satisfecho con el resultado.Me cojo esas escaleras y me voy a la luna.

Petons.

Raúl dijo...

¿Nos deberíamos de quedar siempre en la superficie, entonces?
Petons

Francisco Ortiz dijo...

Pero no todas las pasiones son decepcionantes. Hay pasiones que van al paso, pasito a pasito, pasiones lentas en las que no todo se quema al principio.

Alicia dijo...

Pero.. para entonces ya tenemos otra pasión encendida. ¿No?

Me encantó su blog, Un saludo

Shirsti dijo...

Tal vez esto ocurre cuando el objeto de la pasión no es lo que uno espera, ... es decir que era una ilusión, no algo real.

Rod_V.C dijo...

Han cambiado los visitantes de tu "barrio" y hace tiempo no venía, pues pensé que no estabas publicando.
Hace muy poco me apasioné con una mina...y la verdad, al profundizar, pensé "menos mal que no la conocí del todo" creo que la había idealizado totalmente.
Uff maldita tendencia a buscar "el ideal del yo"
...Cierto lo que dice Francisco (mucho gusto)...yo tiendo a "conversar" más que a postear, en cambio cuando converso...posteo! jajaj!
Un beso con admiración! (quito la escalera? ; )